Bizcocho de otoño con nueces y calabaza

Bizcocho de otoño

Llega el otoño, y con él los colores ocres y anaranjados, el color calabaza, los amarillos apagados y los marrones. Las calles se inundan de hojas secas que caen de los árboles a modo de lágrimas, llevadas por el viento a su antojo. El sol empieza a salir tímidamente, intentando calentar con sus débiles rayos. 

La gente pasea entre los jardines que reflejan el otoño con claridad. Una terraza al fondo con dos señoras tomando un licor anisado que les devuelva el color rosado a sus mejillas heladas. Una ardilla corre despistada con una nuez entre sus manos levantando una espiral de hojas secas a su paso. 

El otoño se nos antoja una estación larga, preámbulo de un frío invierno. Tazas de té, chocolate y café caliente alrededor de un brasero, bajo las faldas de una mesa que alberga pastas y bizcochos recién horneados.

Olor a hogar, lo llaman. Ese olor a bizcocho recién hecho, mezcla de harina, huevos y azúcar, hecho con mimo por la abuela, que impregna todos los rincones de la casa.

Si queremos hornear un bizcocho de otoño, con calabaza, nueces y anís, os dejo la receta de uno muy rico que solía preparar mi abuela en casa cuando éramos pequeños mientras jugábamos alrededor de la chimenea.

Ingredientes:

300 g calabaza asada
300 g harina
300 g azúcar
3 huevos
185 ml aceite de oliva
3 papelitos de gaseosa blancos y azules
1 copita de anís para pastas
1 puñado de nueces
canela y azúcar para espolvorear

Pasos a seguir:

Hornear la calabaza y triturar.

Mezclar la calabaza con el azúcar, los huevos, el anís y el aceite.

Añadir la mitad de la harina con los sobres de un color. Mezclar y batir bien.

Añadir el resto de la harina con los sobres del otro color. Batir bien. Añadir las nueces troceadas y mezclar.

Poner la mezcla en un molde rectangular de 20x26cm forrado de papel de hornear. Espolvorear bastante azúcar y canela por encima. Decorar con más nueces la superficie. Hornear 30 min. a 200¤.