Ir al contenido principal

Quizás también te interese...

Bizcobrownie de aguacate y cacao

Bizcobrownie de aguacate y cacao Bizcobrownie de aguacate y cacao Como ya sabréis, el  aguacate  es un fruto que se ha puesto de moda en los últimos años. ¿Y por qué, os preguntaréis? El motivo es bien sencillo. Estamos hablando de un superalimento . Es muy recomendable para todos aquellos que necesitéis aumentar vuestro consumo de  ácidos grasos Omega 3 , puesto que  es un fruto rico en estos ácidos. Ayuda a reducir el colesterol malo y aumentar el bueno.  Además es muy recomendable para las mujeres embarazadas, puesto que aumenta sus niveles de ácido fólico tan necesarios para la perfecta formación de nuestro futuro bebé. Las grasas que forman parte del aguacate ayudan a nuestro organismo a absorber en mayor medida los nutrientes provenientes de los vegetales. Las grasas del aguacate ayudan a aprovechar la absorción de antioxidantes entre 2 y 15 veces más , por ello, es un aliado perfecto del resto de vegetales de nuestras e...

Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta



Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta
Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta


¡¡¡Hola a tod@s un día más!!! Me apetece mucho enseñaros en este post una de las mejores recetas que he preparado, hasta ahora, de masa de pizza casera. La auténtica masa de pizza italiana. La fina y perfumada, con una textura crujiente, elástica al moldearla, con un gran aroma y un sabor extraordinario. Se trata de hacer una masa de pizza sin amasado. Ese tedioso proceso que aunque es generalmente corto, en torno a unos diez minutos, a muchos de vosotr@s les espanta o temen no saber hacerlo, o que por falta de tiempo, ocasiona que nunca tengamos ganas de hacer nuestra propia masa de pizza casera, haciendo que queramos olvidarnos de complicaciones y la compremos hecha. 

Pues bien, hacer esta masa de pizza casera es de lo más sencillo, pues únicamente vamos a tener que mezclar los ingredientes y dejarlos reposar en el frigorífico durante 24 o 48 horas, mientras la masa, por sí sola, toma forma, toma textura, toma aromas, se amasa y termina lista para estirar y rellenar.  

Haciendo la masa de esta manera partes de la ventaja que puedes preparar los ingredientes un día y no necesitas cocinarla hasta dos o tres días después, cuando vayas a tener tiempo, por ejemplo el fin de semana. 

En esta ocasión he utilizado harina de espelta. ¡Ojo, porque la espelta deriva del trigo, por lo que sí contiene gluten,  y por tanto no es apta para celíacos! En estos casos nos iríamos a otro tipo de harinas como la de arroz, maíz, yuca, teff, mijo… aptas para la gente que no puede consumir glúten. Eso sí, no puedo deciros cuál sería el resultado con ninguna de ellas porque no las he probado para tal fin y en casa no tenemos ninguna intolerancia. Pero hoy en día hay muchas webs que nos enseñan muchas recetas para las personas con este tipo de intolerancia y productos diversos en el mercado que nos ayudan a que la dieta para celíacos sea más llevadera.


Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta
Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta


De momento vamos a centrarnos en este tipo de harina que está en auge gracias al descubrimiento de sus múltiples propiedades y beneficios para la salud. 

Antiguamente dejó de producirse en detrimento del trigo porque sus costes de producción eran mucho más elevados. Pero hoy por hoy, con la dieta y los hábitos de vida saludable, la espelta ha vuelto a coger fuerza convirtiéndose en protagonista de muchas cocinas, gracias a su potencial de proteínas, minerales y vitaminas, considerándose una gran alternativa al trigo. La espelta es buena para personas con problemas gastrointestinales puesto que tiene propiedades antiinflamatorias. 

También podemos encontrar la variedad de harina de espelta integral, por si os interesa. Cuando hablamos de espelta, estaríamos hablando de un cereal cuyo cultivo es milenario, situándose su origen hace casi 7000 años en Irán, desde donde acabó extendiéndose hacia oriente, por lo que existen referencias de su uso en el Antiguo Egipto e incluso en China, en donde también llegó a utilizarse para elaborar singulares cervezas chinas. 

La masa de pizza que hoy os explicaré más adelante va a ser muy sencilla, con muy pocos ingredientes y rápida de hacer. Saludable, crujiente, y repleta de sabor. Además, para mejorar su textura, vamos a realizar un horneado a toda potencia. Con el horno precalentado a temperatura alta y con un golpe de calor importante al inicio, a modo de imitación de un horno de piedra que alcanza los 400ºC,  tal y como se hornean las auténticas pizzas de pizzería. 

El relleno lo va a elegir cada cual, y puede ir desde la preparación de la pizza más sencilla como la margarita de tomate y queso o  una pizza más condimentada, con orégano, york, queso, jamón, peperonni… o aquello que se nos ocurra y que más nos guste. 

Consejo:

La base os va a quedar muy muy fina, por lo que recomiendo que no os paséis con el relleno. Apostad por ingredientes ligeros y poco húmedos. Yo la hice de jamón dulce y cuatro quesos. Con las cantidades que os pongo os saldrán dos pizzas pequeñas finas. En base a esto, ya es vuestra elección la cantidad de harina a utilizar.


Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta
Cómo hacer masa de pizza casera sin amasar con harina de espelta



📝Para imprimir la receta de Masa de Pizza sin amasado de harina de espelta en pdf pincha aquí.👈

Ingredientes para dos pizzas finas pequeñas:

250g harina de espelta (integral o no)
La harina de espelta contiene mucha proteína, un 15%, que nos proveerá una masa parecida a la elaborada con harina de fuerza, firme pero elástica y extensible. Este tipo de harina absorbe más agua por lo que es posible que tengamos que añadir un pelín más.
170ml agua templada
10ml aceite de oliva
5g sal
2,5g levadura fresca o 1g levadura seca

Pasos a seguir:

Diluir la levadura en agua templada. En un bol grande mezclar todos los ingredientes ayudándonos de una cuchara de palo. A continuación, una vez todo ligado dejamos reposar la mezcla durante diez minutos. 

Seguidamente, la trabajaremos un poco dándole una forma redondeada y dividiéndola en dos partes iguales e introduciéndola en dos bols engrasados de aceite y directos al frigorífico para su reposo. La dejaremos en el bol tapado con film o con tapa y no la volveremos a tocar. La tendremos descansando en la nevera un mínimo de 24 horas. En este tiempo habremos conseguido que la propia masa se haga buena, que aumente su volumen. Si es necesario, podemos dejar la misma masa sin tocar por dos o tres días más antes de usar.


 

En el momento que vayamos a cocinarla recomiendo sacarla del frigorífico un par de horas antes de trabajarla, para que tome temperatura y sea fácilmente manejable. A la hora de estirarla vais a ver qué fácil es. Tan solo tendremos que enharinar la superficie de trabajo y coger nuestra masa. Ir girándola como si fuese un disco, estirando desde las puntas y girando girando sin parar dejando que ella misma vaya extendiéndose. Podemos hacerlo en la misma superfice de trabajo si no somos muy habilidosos, o incluso dejando mitad disco sobre la encimera y la otra mitad colgando, de manera que la propia gravedad vaya extendiendo y estirando la masa. Tenéis que ser rápidos si la mantenéis en el aire porque estira mucho de manera que se os puede romper. Si os parece mejor, manejadla desde la encimera, estirando los bordes poco a poco hasta ir dándole una forma redondeada y fina. No es necesario más. Después la pasamos a un papel de horno que podemos enharinar y empezamos a rellenarla. 


 

Mientras tanto habremos tenido el horno precalentando a 270ºC, a tope, con calor arriba y abajo durante al menos 20 minutos, con las planchas o bandejas en el interior del horno. Pasamos a rellenar con el tomate, la mozzarella, el jamón, el orégano y los ingredientes elegidos. 

Pasado este tiempo, y con mucho cuidado, depositamos la pizza en la superficie caliente de la bandeja del horno y horneamos a 250ºC unos 6 minutos. 

El tiempo de horneado es corto porque la base es muy fina. Por ello os he aconsejado elegir ingredientes ligeros que se cocinen rápido. Éste será el secreto para obtener la mejor pizza casera que hasta ahora hayáis probado. 





Y..¡ voilà¡ No me diréis que no es sencillo el método. Hay que darle las gracias a Iban Yarza, un maestro panadero, de cuyo libro "Pan Casero" he podido extraer la receta. Es un libro muy interesante y didáctico, pensado para gente que se inicia en el satisfactorio trabajo de hacer pan en casa. Con explicaciones detalladas de diversos panes de todas partes del mundo. Lo recomiendo cien por cien.

Y para acompañar esta deliciosa pizza, por supuesto, un vinito espumoso rosado o tinto le va que ni pintado. ¿Os animáis con la receta para este fin de semana?


Comentarios

Lo más visto del blog