Mousse de fresas naturales y chocolate blanco, un postre casero

Mousse de fresas naturales y chocolate blanco, un postre casero 

  

Mi publicación llega un poco tarde, sí, lo sé. Ya no es temporada de fresas, pero hasta hoy no había tenido tiempo de publicar en el blog ninguna receta nueva. Esta mousse de fresas la preparé este invierno, nada más llegar las primeras fresas. Me moría por tener un postre de fresas naturales en el blog. No tenía ninguna receta publicada con esta deliciosa, y por qué no decirlo, sensual fruta. Me atrae mucho su color y me encanta y me apetecía mucho preparar algo con ella. Lo más fácil era este postre, que puede disfrutar toda la familia, y que serví de forma individual. Su color tan llamativo lo conseguí usando un poco de colorante. No es necesario ni mucho menos, pero me encantó el color que le dió. Muy apetecible.

Os cuento un poco en qué consiste una mousse y os detallo cómo de fácil resulta prepararla. 

Una mousse es un postre de origen francés, cuya base es la clara de huevo montada a punto de nieve o la nata batida, las cuales le dan una textura esponjosa, repleta de diminutas burbujas. De hecho, el término francés "mousse" se traduce al español como espuma. Es un postre ligero, que generalmente se prepara con frutas o con chocolate. Se deshace en la boca, y notas cómo de delicada llega a ser su textura.

Para preparar esta mousse de fresa he utilizado fresas naturales de temporada, lo que confiere al postre un aire muy fresco. Para darle un sabor  y un dulzor extra, he añadido unas virutas de chocolate blanco que combinan a la perfección con las fresas. 

Al ser un postre tan colorido y vistoso, la mousse de fresa es ideal para presentar un día de celebración en casa. No resulta nada empalagoso, por lo que podemos servirlo después de cualquier comida. En febrero ya empiezan a haber fresas en nuestras fruterías. Podemos disfrutar de ellas durante pocos meses, pues son de temporada corta, pero durante su período de consumo, cuando cuentan con todas sus propiedades, se pueden hacer multitud de preparaciones, bien comiéndolas naturales, simplemente acompañadas de nata con azúcar, en macedonia,... o aprovechar para preparar una rica tarta de fresas, un brazo de gitano, un hojaldre con crema pastelera, o esta vistosa y fresca mousse. 

Esta mousse la he preparado combinando tanto merengue italiano, hecho a base de claras de huevo y almíbar, como nata montada. El merengue italiano le da una textura firme. Y para que su consistencia sea más dura todavía y no se baje la preparación, le he añadido un poco de gelatina, lo que hará que aumente su consistencia y mejore su presentación. De esta manera, la mousse aguantará en el frigorífico varios días intacta. El merengue italiano implica un poco más de dificultad en el postre, pero si no os atrevéis con él, utilizad un simple merengue, sin almíbar, y el resultado será óptimo también. Tampoco es cuestión de complicarnos demasiado si lo que queremos es realmente comer una rica mousse de fresas. Podemos obviar este paso y no pasa nada. 

Eso sí, no os olvidéis de las virutas de chocolate blanco. Esta mousse no resulta especialmente dulce, así que cuando muerdes, si encontramos un trocito de chocolate blanco, el bocadito se convierte en un placer. 

Mousse de fresas naturales y chocolate blanco, un postre casero 

📝 Para imprimir la receta de Mousse de fresas naturales y chocolate blanco en pdf, pincha AQUÍ.👈

Ingredientes:

400 g de fresas frescas
125 g de nata para montar (mínimo 35% de grasa)
170 g de azúcar
2 claras de huevo
pizca de sal
2 hojas de gelatina
zumo de 1 limón pequeño

unas lascas de chocolate blanco

colorante rojo

30ml agua

Para decorar:

fresas frescas

hojas de hierbabuena

o nata montada o lascas de chocolate blanco

Mousse de fresas naturales y chocolate blanco, un postre casero 

Pasos a seguir:

Dejamos macerar las fresas con 50g de azúcar y el zumo del limón. Esto es para potenciar su sabor.

Mientras tanto dejamos hidratando las hojas de gelatina en agua fría y procedemos a montar la nata. 

Tiene que estar bien fría para que monte bien, al igual que las varillas y el bol a utilizar. Puedes poner los utensilios en el frigorífico un rato para que cojan frío.

Una vez montada, pasamos las fresas por la batidora, para a continuación, pasarlas por un colador de malla fina que elimine las semillas. De esta manera la mousse quedará más suave. Esto no es imprescindible, así que lo dejo a vuestra elección.

Apartamos dos cucharadas del puré y lo calentamos al microondas unos segundos. Ahí es donde vamos a disolver la gelatina hidratada y bien escurrida.

Mezclamos el puré de fresas con la gelatina y con la nata utilizando una espátula y siguiendo movimientos envolventes. Añadimos un poco de colorante rojo. Esto tampoco es imprescindible, pero le da un color más intenso y apetecible a la mousse. 

Finalmente montamos las claras de huevo junto con una pizca de sal. Al contrario que la nata, las claras necesitan estar a temperatura ambiente.

Poner en un cazo el azúcar restante junto con 30ml de agua. Vamos a hacer un almíbar ligero. Para ello, cuando llegue a los 120º apagamos el fuego y lo vertemos en forma de hilo sobre las claras de huevo. Así obtendremos un rico y brillante merengue italiano.

Ha llegado el momento de incorporar el merengue a la mezcla. Mezclamos con varillas manuales o espátula hasta que todo quede bien integrado. Finalmente añadimos unas lascas de chocolate blanco o pepitas, lo que tengamos. 

Verter la mousse en moldes individuales. A mi me han salido unos 8 vasitos. Dejamos en el frigorífico enfriar durante al menos cuatro horas, para que se enfríe bien.

Para decorar, utilizaremos unas fresas frescas y unas hojitas de hierbabuena, o bien un poco de nata montada y unas lascas de chocolate blanco por encima. Yo he optado por la fresa natural y la hierbabuena que perfuma la mousse muy fresca. 

Mousse de fresas naturales y chocolate blanco, un postre casero