Me encantan este tipo de tartas tan de invierno, de taza de te y peli con mantita en el sofá...
En este caso, la receta de la tartaleta lleva como relleno peras D.O.P. Jumilla, que no son precisamente de invierno, sino más bien al contrario, pero me apetecía tanto preparar una tarta de estas que aunque habitualmente se hacen con manzana o calabaza, la preparé con este delicioso relleno de verano.
Utilicé las peras de Jumilla porque me gusta mucho su sabor. Una vez maceradas con las especias y el azúcar y tras el horneado, queda un bocado de lo más sabroso. Más arriba os he puesto cómo es esta dulce pera, de dónde proviene y cuál es su textura.
La receta es bastante sencillita, al alcance de cualquiera con ganas de cocinar. Ideal para empezar a familiarizarse con la cocina, la repostería, los dulces... Os pongo todo bien detallado para que no tengáis ninguna duda de cómo prepararla. Podéis acompañarla de helado de nata, podéis servirla como merienda con un té o café, o con un golpe de calor antes de comerla.
Utensilios necesarios: Molde rectangular de 30x10cm y papel de hornear
Ingredientes
Para la masa quebrada:
300 g de harina todo uso
pizca de sal
60 g de manteca
115 g de mantequilla fría sin sal
4 cucharadas soperas de agua helada
Para el relleno:
750 g de peras peladas cortadas en láminas finas (aproximadamente 10 peras pequeñas)
30 ml de jugo de limón
175 g de azúcar
1 cda. sopera 15 g de harina normal
1 cda. sopera 15 g de Maizena
pizca de sal
2 c/c de canela
1 c/c nuez moscada
2 c/s extracto vainilla
30 g de mantequilla fría, cortada en cubitos pequeños
Para decorar:
Yema de huevo batida o un poco de leche
Azúcar blanco o moreno
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| Tartaleta de peras D.O.P. Jumilla |
Pasos a seguir:
Para la masa quebrada:
Mezclamos la harina y la sal y tamizamos.
En un bol grande mezclamos la manteca junto con la mantequilla cortada en dados bien fría. Agregamos la harina junto con la pizca de sal.
Amasamos y trabajamos la masa hasta que se vayan mezclando todos los ingredientes. Añadiremos 4 cucharadas soperas de agua fría a medida que vamos amasando, de manera que la mezcla vaya tomando consistencia y podamos formar una bola.
Esta bola que hemos hecho pesará 500g.
Por un lado separamos 170 g de masa, con la que haremos la tapa. El resto será la base. Es decir, una parte para la tapa y dos partes para la base.
Para trabajar la masa y estirarla os aconsejo que utilicéis papel de horno. Pondréis una de las bolas entre dos hojas de papel de hornear y con el rodillo iremos estirando la masa hasta que tenga la medida del molde. Debe quedarnos bien estirada y fina.
Una vez estiradas ambas masas las dejamos enfriar en la nevera mientras preparamos las peras.
Para el relleno:
Mientras se enfrían las masas prepararemos el relleno de peras. Para ello deberemos pelarlas. Las cortamos en láminas finas y las rociamos con el jugo del limón para que no se oxiden.
En un bol mezclamos el azúcar junto con la harina, la maizena, la canela, la nuez moscada y una pizca de sal.
Agregamos dos cucharadas soperas de extracto de vainilla sobre las peras y la mezcla de azúcar. Removemos bien.
Una vez estén las peras bien impregnadas de azúcar es el momento de montar el pastel.
Montaje:
Engrasamos el molde con mantequilla o utilizamos papel de horno.
Ponemos la masa en la base. Añadimos el relleno de peras y sobre ellas la mantequilla cortada en daditos pequeños.
Extender la masa restante sobre la tarta.
Para hacer el enrejado iremos cortando la masa en tiras rectas con la punta afilada de un cuchillo o un cortapastas y depositándolas cuidadosamente en la parte superior formando una rejilla.
Para dar brillo, vistosidad y un crujiente adicional a la tarta de peras extendemos con una brocha yema de huevo batida o un poco de leche, y sobre ella espolvoreamos generosamente azúcar blanco o moreno.
Ahora ha llegado el momento de poner a precalentar el horno a 180º. Mientras se precalienta durante diez minutos dejaremos la tartaleta de peras en el frigorífico para reafirmar la masa.
Hornear sobre una rejilla del horno a media altura. Hornear durante 40 minutos tapado con papel de horno o papel de aluminio.
La pera debe burbujear en el interior. Eso significa que estará cocida.
TIPS / CONSEJOS
Trascurrido este tiempo sacar del horno y dejar enfriar completamente antes de cortarlo. Es mejor hornear el pastel con anticipación, enfriarlo completamente y luego calentar cada porción según sea necesario después de cortarlo. El relleno continúa espesándose a medida que el pastel se enfría, y si lo cortas demasiado pronto se desmoronará por todas partes.
Puedes guardar el pastel sobrante durante varios días a temperatura ambiente tapado con un paño. Incluso si es necesario puede almancenarse en el congelador por unos días.
Si en lugar de una masa quebrada para la parte superior desean hacer un cramble, deben mezclar media taza de azúcar junto con harina, y 8 cucharadas de mantequilla, más una pizca de sal, hasta obtener una textura arenosa que dispondrá sobre la parte superior de la tarta.
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