Tiramisú de limón

 

Tiramisú de limón

¿Eres un fan del tiramisú italiano? Pues prepárate para descubrir una receta diferente que te hará chuparte los dedos. En esta receta no utilizaremos café ni cacao, sino un ingrediente más fresco. Se trata de un tiramisú de limón ideal para toda la familia. Con un sabor intenso a limón, un bizcocho muy esponjoso y una textura suave y cremosa. Para decorarlo he utilizado un brillante merengue suizo, dorado con el soplete para darle un aspecto muy vistoso que solo mirarlo ya entra por los ojos.

Podeís utilizar limas en lugar de limones también. O inclusive naranja. La receta es la misma pero sustituyendo el jugo por cualquier otro cítrico. Aunque si lo que estáis buscando es la receta de un tiramisú rico y fresco,  también podéis optar por éste que hice las navidades pasadas a base de fresas. Está increíble. Os dejo el enlace por si os interesa. 

Tiramisú de fresas y naranja

Siempre que vayáis a preparar una receta, aseguraos de tener todos los ingredientes a mano, comprados y pesados. Con todos los utensilios que vayáis a utilizar preparados. Es la mejor forma de no equivocarse en la receta, seguir un orden, y que no nos falte nada a última hora. En este caso los utensilios que vais a necesitar son: termómetro, espátulas, batidor de varillas, film transparente, un colador, manga pastelera desechable con boquilla rizada y un soplete.

Hoy en día es muy fácil de adquirir un soplete en cualquier ferretería o tienda especializada de cocina. Es muy útil, y puedes utilizarlo para hacer otras preparaciones. No son caros, y son fáciles de usar. 

Tiramisú de limón

La receta en sí no es difícil. Se prepara en más o menos una hora. El tiramisú de limón es un postre que puede gustar a mucha gente, por lo que puedes prepararlo para cualquier evento familiar o con amigos. Yo lo preparé estas Navidades y fue todo un éxito. Para bañar los bizcochos puedes hacerlo con almíbar hecho a base de jugo de limón, o bien, sustituir éste por licor de Limoncello. Al final el sabor es muy parecido. El alcohol se evapora y prácticamente no se nota en la preparación, pero si no queréis utilizar nada de alcohol pues lo dicho, sustituirlo por jugo de limón.

Se prepara de un día para otro. De esta manera la consistencia es más sólida y podemos sacarlo del frigorífico sin miedo a que al pasarlo a un plato llano, se desparrame la crema. Como veis en la foto, después de una noche en la nevera, el tiramisú se compacta y se puede servir sin ninguna dificultad. Se cortan muy bien los trozos. Y queda muy elegante.

Se puede decorar con merengue suizo o normal. Se puede utilizar una lemon curd sobre la superficie si preferís que tenga un sabor más intenso a limón. O que tenga un bonito color amarillo. La decoración siempre es a gusto del que prepara la receta. 

En la elaboración podéis utilizar bizcochos de soletilla o tipo Savoiardi. Los que más os apetezcan. Y el queso Mascarpone también se puede sustituir por un queso crema tipo Philadelphia en caso de que no tengáis a mano para comprar este queso italiano. 

Sea cual sea la opción que elijáis, este tiramisú de limón os va a quedar muy rico puesto que la combinación de crema pastelera de limón, junto con queso y nata montada está completamente acertada. Su sabor y las cantidades que os pongo para mí son las más adecuadas. El resultado es perfecto. 

Más abajo os pongo una foto del corte para que veáis como queda en su interior.

Tiramisú de limón

📝Para imprimir la receta de Tiramisú de limón en pdf pincha aquí👈

Ingredientes:

Bizcochos de soletilla

250g queso Mascarpone o queso crema tipo Philadelphia en su defecto

 50 azúcar glass

250ml. nata para montar sup. 35%m.g.

Para el almíbar de limoncello:

150ml agua

100ml licor Limoncello

50g azúcar

Para la crema pastelera de limón:

250ml leche

100g azúcar 

2 yemas de huevo XL

25g harina de maiz (Maizena)

50ml jugo de limón

piel rallada de 1 limón

Para decorar:

Para hacer el merengue suizo:

2 claras de huevo XL

el doble del peso de las claras en azúcar glass

unas gotas de limón

Pasos a seguir:

En primer lugar empezaremos haciendo la crema pastelera de limón.

Para ello pondremos en un cazo la leche con la piel limpia del limón rallado y la mitad del azúcar aproximadamente.

Lo mezclamos y lo llevamos a fuego medio-bajo hasta que la leche esté caliente para que infusione durante 10 minuntos y quede el aroma de limón en la leche.

Ahora, vertemos en un bol el azúcar restante junto con la harina de maíz. Añado el zumo de limón y mezclamos hasta que esté bien disuelto, que no queden grumos. Incorporamos las yemas y volvemos a mezclar.

Añadimos la leche infusionada, que ya se habrá enfriado, a través de un colador para eliminar las pieles del limón y volvemos a calentar en el mismo cazo.

Coceremos a fuego a una temperatura media hasta que la crema pastelera espese.

Para dejarla enfriar la verteremos en una fuente tapada con film de manera que toque la crema para que no se cree una costra.  La dejamos a temperatura ambiente.

Seguimos con el almíbar para remojar los bizcochos.

Para ello pondremos en un cazo a fuego medio, el agua junto con el azúcar. Cuando empiece a hervir añadimos el licor de Limoncello y dejamos cocer dos minutos. Retiramos del fuego y dejamos enfriar hasta su utilización.

Seguidamente batiremos la nata bien fría con unas varillas. Cuando empiece a tomar cuerpo vamos agregando el azúcar glass poco a poco, sin parar de batir. No hace falta que la nata quede firme completamente. La reservamos en el frigorífico.

Batimos el queso Mascarpone bien frío con unas varillas para que se ponga cremoso. Añadimos la crema de limón ya fría. Mezclamos con las varillas hasta integrar completamente. A continuación, con una espátula, vamos a ir añadiendo la nata montada poco a poco con movimientos envolventes.

Llegados a este punto ya tenemos que empezar a montar el tiramisú.

Para ello forraremos una fuente con cierta profundidad con papel film, para luego poder desmoldar bien.

Iremos bañando los bizcochos en el almíbar haciendo la primera capa. A continuación agregaremos la crema pastelera de limón. Otra capa de bizcocho, otra de crema, y un tercera de bizcochos y rematamos con más crema.

Tapamos con film de nuevo y llevamos al frigorífico durante toda la noche. Una vez adquiera consistencia al día siguiente ya podemos ir quitando el film, poner un plato llano y darle la vuelta con cuidado.

Este postre también puede servirse en vasitos. El procedimiento es el mismo. Igualmente nos va a quedar una presentación muy bonita.

Finalmente para decorar preparamos el merengue suizo. Para ello vamos empezar poniendo el azúcar y las claras de huevo en un recipiente metálico al baño María. No necesariamente el agua tiene que tocar el recipiente. Simplemente necesitamos 10 minutos de calor para que las claras cojan volumen y queden pasteurizadas. Removemos sin parar y esperaremos a alcanzar una temperatura de 60º. De esta manera nos aseguramos que no sobreviva ninguna bacteria.

Recién sacado del calor lo empezamos a batir con unas varillas eléctricas y una cucharada de jugo de limón. Se formará un merengue firme y brillante pasados 10 minutos.

Con la ayuda de una manga pastelera iremos repartiendo el merengue en copetes sobre el tiramisú de limón haciendo la decoración que más nos guste.

Y así es como quedaría este rico y delicioso tiramisú. Espero que lo probéis y os guste tanto como a mí.

Tiramisú de limón